Durante esta semana, Rodrigo Zeballos anunció de manera oficial se regreso a Rally Argentino para 2023, con la compañía de Sebastián González, para compartir un Citroën C3 Rally2 del GP Motorsport. Así, el múltiple campeón uruguayo volverá a nuestro país tras un año de significativo aprendizaje en España, donde pulió sus habilidades para retornar revitalizado a un certamen, cuya clase RC2 crece sin pausa.

La temporada 2021 fue la última que incluyó a Rodrigo Zeballos como piloto de Rally Argentino, donde debutó en 2017 y disputó 19 competencias, en las que logró cuatro top 5 y diez arribos en el top 10, siempre con vehículos Maxi Rally Turbo.

Con el segundo año de la pandemia, los planes del piloto de Maldonado cambiaron significativamente, por lo que se mantuvo enfocado en Uruguay, antes de comenzar a incursionar en España. Allí, además de disputar algunos eventos del Supercampeonato, también finalizó tercero en el certamen de la Copa de Tierra, producto de dos top 5 y un podio en apenas su primer año de experiencia con un Skoda Fabia Rally2 evo.

Pero, con la llegada de su nueva hija, Rodrigo Zeballos decidió aprovechar la necesidad de continuar su carrera en un lugar cercano a su familia, para combinarlo con la reanudación de un proyecto que tenía pendiente en Rally Argentino: saltar a un Rally2.

“Cuando supe que iba a ser padre, descarté volver el próximo año a Europa. Quería estar cerca de casa y disfrutar de mi nueva hija. Además, un día tuvimos una charla muy interesante con Leandro Bonnin, acerca de correr en Argentina con estos nuevos autos Rally2 y quedamos muy entusiasmados. Así fue como empezamos a delinear esta hermosa locura, también junto a Gabriel Pozzo”.

Dicho esto, el múltiple campeón uruguayo no ocultó su alegría por volver a la Argentina, para competir al máximo nivel: “La verdad, estoy encantado con este proyecto. Significa volver a uno de los mejores campeonatos de Sudamérica y del mundo, especialmente porque tendrá una temporada 2023 con, más o menos, veinte autos R5 / Rally2”.

“Además, hay muchos pilotos que pueden ganar y vemos que las carreras se están peleando segundo a segundo”, agregó Zeballos en alusión a la espectacular definición del Rally de Entre Ríos, donde el margen de victoria fue de apenas 1,9 segundos.

Con respecto al arribo desde Francia de su nuevo C3 Rally2 de última generación, el piloto uruguayo dijo: “Estimamos que el Citroën va a llegar a Uruguay en los primeros días de enero y a partir de ahí vamos a llevarlo directamente a Córdoba”.

De esta forma, GP Motorsport se garantiza contar con, al menos, tres Citroën C3 Rally2 la próxima temporada, ya que Bonnin y Rodrigo Disalvo también aguardan por la pronta llegada de idénticas unidades provenientes de Francia.

“Para mí, la elección de Citroën fue el cierre de un círculo de distintas piezas que encajaron perfecto. En mi caso, desde 2017 estaba en charlas sobre este proyecto con Florent Meilhaud, quien es ingeniero de la marca. Si bien corrí en España con un Skoda, fue solo porque se trataba del auto que el equipo tenía disponible”.

“Ahora, la idea fue reanudar aquel proyecto que tenía desde hace varios años atrás y aprovechar que Leandro y Rodrigo también accedieron a tener un Citroën. El cierre de ese círculo fue lo que terminó por convencerme para apostar por este proyecto, con una marca que nos apoya en términos de logística e ingeniería”.

Dicho esto, Rodrigo Zeballos hizo hincapié en este tipo de respaldo técnico y en los auspiciosos resultados que Citroën está teniendo en Sudamérica, como clave para escoger al C3 Rally2 como su vehículo para 2023.

“Está claro que es uno de los mejores autos de la actualidad, junto con el Skoda y el nuevo Hyundai i20 N Rally2. Creo que elegimos una muy buena marca y un buen auto, con la capacidad técnica suficiente como para pelear por un campeonato”.

“El próximo año vamos a gestionar toda la atención del coche con el personal del equipo de Gabriel, pero seguramente Florent también va a estar con nosotros, para darnos el apoyo técnico de Citroën Racing. Además, es probable que incluso hagamos algunos test, en los que traigamos al ingeniero Olivier Maroselli”.

Acerca de su crecimiento como piloto, luego de su paso por España, el uruguayo dijo: “Salir al exterior y ver cosas nuevas es algo que siempre ayuda, por la experiencia y los conocimientos que se adquieren. De hecho, allá teníamos una sola pasada permitida para los reconocimientos y eso nos ayudó a prestar más atención al camino y a aprender muchas cosas nuevas para escribir la hoja de ruta”.

“Pero, los cursos que hice fueron muy importantes. Pude trabajar con Xevi Pons, Nil Solans y David Nafría en tierra y asfalto. Además, nos capacitamos en cuanto a notas y cambiamos la manera de hacer la hoja de ruta. Eso nos ayudó mucho, porque nos encontramos varios rallyes en los que, de no ser por la hoja de ruta que tenemos ahora, habríamos tenido muchas dificultades”.

“Durante mucho tiempo, en Uruguay se acostumbraba a crear la hoja de ruta en base a las marchas. Por eso, aposté a crear una hoja en base a la velocidad de curva. Ahora, uso una escala del 1 al 10, que me ayudó muchísimo a saber cómo posicionar el auto desde una curva hasta la otra, sobre todo cuando hay sectores ciegos, que es donde más necesitás notas que te permitan imaginar qué es lo que viene”.

“Además, los cursos que hice también nos sirvieron para leer y acostumbrarnos mejor a los cambios de pisos. Al final, todo esto te ayuda a salir a los tramos de la forma más rápida y segura posible, porque al final eso es lo que más se necesita en las primeras pasadas y lo que muchas veces termina definiendo una carrera”.

Sobre el final, Zeballos se permitió dejar un pequeño, pero importante adelanto respecto del Rally Ciudad de Villa Dolores: “Hay un 90 % de probabilidades de que vayamos a correr la próxima semana, con un Maxi Rally del GP Motorsport. Como mi Peugeot ya fue vendido, ahora vamos a correr con otro coche, para asegurarnos de recuperar el ritmo después de un par de meses sin carreras”.