Podría decirse que tanto esfuerzo tuvo su recompensa. Y eso que en algún momento Mauro Debasa pensó en tirar la toalla y abandonar la 44ª edición de la Vuelta de la Manzana (quinta fecha del Rally Argentino DIRECTV) al penar con los problemas que aparecieron en la caja de cambios de su Renault Clio durante la disputa del primer tramo de competencia, algo que sin dudas modificó su estrategia: "Al competir varios pilotos del zonal, la idea era tratar de salir a buen ritmo y aprovechar las primeras pasadas de los tramos del sábado, ya que en la segunda los caminos se romperían mucho. Pero en el primer sector ya se nos rompió la caja y nos cambió los planes. Yo ya me había dado por abandonado, porque el ruido era muy fuerte y no quería romperla del todo. Pero hablé con Maxi, mi hermano, y me dijo que continuara, que no aflojara. Seguimos y el auto aguantó", comentó.

En ese sábado, Debasa y su navegante Ángel Rivero lograron completar con lo justo el Día 1 y ubicarse en el cuarto lugar, a 55.2 segundos del líder Raúl Racca. El equipo (Debasa Competición) trabajó a contrarreloj y en 42 minutos consiguió cambiar la caja. Y con el auto en condiciones, el piloto de Catriel impuso un ritmo que nadie pudo seguir y no dejó de escalar hasta llegar a lo más alto del clasificador de la Clase 9. "El domingo optamos por salir con todo, a pesar de que en el arranque se nos paró el auto en un retome. Por suerte nos alcanzó y pudimos terminar adelante. Siempre es una linda sensación ganar una Manzana y quedamos mucho más contentos por la forma en la que se logró, peleando y viniendo desde atrás, que es como a uno le gusta ganar", aseguró.

Mauro cosechó su cuarta Manzana (dos por el Argentino y otras dos por el Regional), aunque ésta le dejó un sabor aún más especial: "Se disfruta mucho más ganar así. Y a uno le queda como una gran anécdota, está bueno poder decir que se salió a todo o nada y que el resultado final fue positivo. Te reconforta mucho más festejar así, porque a mí me gusta cuando las carreras se definen a la décima o cuando hay que remontar", sostuvo.

Y tampoco se olvidó de agradecer a su hermano, a su padre y a todos los integrantes del equipo que aportaron su granito de arena para que pueda celebrar en su regreso a la divisional, ya que no competía desde finales de la temporada 2013, cuando terminó cuarto en el certamen de esta clase. En ese torneo, Debasa fue protagonista y ahora revalidó esas condiciones: "Este resultado te brinda mucha tranquilidad y demuestra que el auto y el equipo están a la altura de las circunstancias. Es muy bueno ganar lejos de casa como lo hicimos en Catamarca 2013 y también hacerlo en la zona, donde nos sentimos locales. Para todo piloto del Regional el primer gran sueño es participar en una Manzana y el siguiente es ganar una edición", afirmó.

Finalmente, habló de los planes para la segunda mitad del año: "Las ganas de seguir en el Argentino siempre están. Queremos ir a las carreras que nos queden más cerca, así que habrá que tratar de reunir el presupuesto en estos días. Se viene El Calafate, una fecha que nos dejó un sabor amargo el año pasado ya que veníamos ganando y debimos abandonar. No quiero ir para tener una revancha ahí sino que deseo estar para disfrutar de esos lindos caminos. No todo es ganar, sino que uno va para desenchufarse, para compartir momentos con amigos... Todo rally te deja algo nuevo", manifestó.