Revalidar la corona dentro de la Clase RC2N parece una misión prácticamente imposible para Antonio Carrera en esta temporada 2017, en especial porque los números no juegan a su favor ya que tras siete fechas corridas aparece a 161 unidades del líder cuando restan 177,5 por disputarse. Sin embargo, el cordobés no es de los que tiran la toalla rápidamente y pretende cerrar este calendario lo más arriba posible y peleando por el triunfo en cada presentación, como sucedió en la pasada cita en Tucumán.

En el denominado "Rally Cuna de la Independencia", "Tony" regresó a la categoría dentro de una nueva estructura (el Pro Driver) y lo hizo de la mejor manera, al quedarse con su primer festejo en este 2017. "Sabía que tenía un auto competitivo, la duda pasaba por saber si yo iba a estar a la altura de las circunstancias. Este año ha sido un poco esquivo para nosotros. La `bomba´ que nos pegamos en el arranque del calendario nos perjudicó, especialmente en el tema económico", indicó.

"En la previa, el plan era ver dónde estábamos parados. Pero en el primer tramo de competencia pinchamos una goma a seis kilómetros del final y ahí la punta nos hizo 20 segundos. En el siguiente sector nos complicamos con la tierra de quien largaba delante, aunque solamente cedimos dos segundos, así que ahí ya comencé a pensar que estábamos bien. Y el tercer sector pudimos ganarlo", repasó quien cerró el Día 1 a 38.6 segundos del líder Luis Arceluz.

"Para el asfalto me tenía muchísima confianza, aunque no sabíamos qué nos iba a deparar con el tema de la lluvia. Veíamos los parciales y lógicamente eran más lentos que los del año pasado, aunque lo ganamos por mucha diferencia. Y en ese primer tramo del domingo estuvo el quiebre de la carrera, ya que descontamos mucho y nos pusimos a solamente 3.8 segundos. Me sentí muy cómodo pese a la poca adherencia que había; fuimos por el medio, prolijos y rápidos. Era la mano que uno necesitaba meter para pelear por la carrera, aunque era algo difícil de lograr por el nivel que hoy tiene la divisional", aseguró quien cuenta con su hermano Juan Pablo como navegante.

"Sin dudas, a nuestro favor jugó el hecho de que no tenemos nada que perder. Salimos a hacer nuestra carrera y a atacar para acercarnos lo máximo posible. Y la ganamos manejando, que es como me gusta", agregó el campeón.

Carrera buscará seguir por el buen camino al mando del Mitsubishi Lancer Evo X y cerrar de la mejor manera posible la temporada: "Esto te da un lindo impulso. Nunca hemos bajado los brazos, pese a que este año no fue el esperado. Ahora lo importante es mantener la buena racha. Estamos con todas las ganas de pelear adelante. Y hoy más que nunca quiero salir a disfrutar de cada carrera", afirmó.