La victoria en el pasado Rally de Tafí del Valle (Tucumán) no solo le permitió a Gerardo Klus ser el primer piloto de la divisional en repetir festejo en esta temporada sino que también le sirvió para escalar posiciones y recuperar protagonismo en el certamen 2016.

"Por el sistema de puntuación de campeonato, si no sumás en cada fecha, todo se complica. La pauta te lo da el hecho de que soy el único que gané dos carreras y no estoy arriba en el torneo. Por eso la idea principal era esa: salir a sumar. Después se nos fueron dando otras cosas", admitió el cordobés.

Entre esas situaciones favorables apareció el retraso que tuvo Samir Assaf, quien en su vuelta a la categoría dominaba pero no consiguió arrancar a tiempo su auto en la etapa final, penalizó y resignó sus chances. "Al principio pensaba que no podía correrlo a Assaf. Me ganó muy bien los tramos en el llano, mientras que en el resto me superó por poco. Pero igualmente no me centraba en correrlo, no valía la pena porque él no tenía nada para perder; mientras que si yo no sumaba en esta fecha, se me complicaba todo", afirmó quien en ese Día 2 debió soportar los embates de Antonio Carrera, que finalmente lo escoltó a 3.6 segundos.

El piloto que maneja el Mitsubishi Lancer Evo IX que le entrega el Pro Rally y que cuenta con su hija Virginia de navegante, hizo un balance de su primera mitad de temporada: "Fue desparejo mi andar. Y eso no es bueno; no sirve ganar una carrera y después pararse en dos... Se penaliza demasiado cuando pasa eso; regalás mucho en el campeonato", admitió.

"Hay que ser regulares y bien parejos. Pasa que uno quiere ganar siempre. Es difícil a veces dejarse ganar y mucho más si te toca venir peleando una carrera con alguien que es tu gran rival en el torneo como sucedió con Carrera en Tucumán. Creo que con él será la gran batalla hasta fin de año. Volverá el duelo que se dio el año pasado en el Cordobés", agregó.

Hoy Meliza Prevedello (la líder del torneo con 121 unidades), Carrera (120) y Klus (113) están separados por apenas ocho puntos. Y se viene otro duro desafío: la tradicional Vuelta de la Manzana en General Roca, Río Negro (del 12 al 14 de agosto). "La Manzana es una carrera que hace mucho que no voy. Al principio la odias y después te termina gustando porque es una prueba difícil, en la que hay que manejar mucho, que presenta cambios de piso constantes. Habrá que correr con la cabeza y olvidarse de intentar ir rápido en los primeros tramos. Se debe encarar todo de una manera muy pensante; es fácil decirlo desde abajo, pero una vez que largás te cuesta mantener eso", sostuvo Klus.